Emiliano Pérez Mencía: Julio Vecino Martínez (1919-2006). Exposición. 112 pp. láms. color 24 x17. Rústica. 2008. ISBN: 978-84-935455-6-7.
ÍNDICE
Presentación
Escultura
Pintura
Dibujo
Apéndice
PRESENTACIÓN
Julio Vecino nació en el año 1919 en Castrogonzalo (Zamora) y pasó en Madrid una parte de su vida. Allí se forjó su madera de artista, de escultor y también de pintor, pues practicó las dos artes, aunque se dedicase más a la primera. Aprendió la técnica de la talla de la madera con el escultor Eduardo Carretero, completando su formación con la lectura y el estudio de libros relacionados con el arte de la escultura y de la pintura. Y, a pesar de contar tan sólo con estudios primarios, se preparó por su cuenta de tal modo que llegó a convertirse en un verdadero maestro.
Su defecto físico (era mutilado de guerra y le faltaba una pierna) no fue obstáculo para desarrollar su actividad, sino todo lo contrario. Ocurría que su andar lento y parsimonioso se trasladaba a su obra, haciendo que pensase y se detuviese más en ella y consiguiendo de este modo una mayor perfección.
Por otra parte, el aislarse con frecuencia de todo y de todos le permitía centrarse más en su vida interior y también en su misma obra.
En el año 1960 regresó a su tierra, estableciéndose hasta su muerte (año 2006) en Fuentes de Ropel, pueblo cercano a su lugar de nacimiento. Allí completó su obra de más de 1600 esculturas y en torno a 100 pinturas. Todo lo cual, junto con varias carpetas de cientos de bocetos y otros dibujos se conservan en lo que era su domicilio habitual.
Porque Julio, de todas sus piezas realizaba un boceto, demostrando también su buen hacer y conocimiento del dibujo. Precisamente, los últimos años de su vida, cuando dejó de trabajar la madera y la pintura los dedicó solamente a dibujar.
En sus tallas utiliza con preferencia la madera de encina, porque sabe muy bien que, aunque es difícil de trabajar, después de pulida, adquiere una textura y belleza difícilmente comparable. También utiliza madera de almendro, de nogal y otras.
Su obra escultórica está marcada por líneas o formas y volúmenes sencillos y equilibrados, llenos de ingenio y sabiduría, ya se trate de una talla realista o abstracta. Algunas piezas nos muestran unas fi guras retorcidas o contorsionadas con una realización perfecta que por sí solas desarrollan el movimiento.
Entre ellas hay gran variedad: muchos bustos, algunos autorretratos, escenas de toros y toreros, piezas de tema egipcio y africano, bailarines, escenas familiares y muchas parejas de enamorados, imágenes
religiosas y también abundantes tallas figurativas y no figurativas, incluidos también algunos bajorrelieves.
Sus pinturas al óleo se centran en temas relacionados con personajes famosos o conocidos, a modo de retratos, y en paisajes, cercanos o más alejados, conocidos, visitados o creados por él.
Ha sido un artista que, cosa curiosa, ha permanecido al margen de cualquier circuito comercial, por lo que su obra se conserva casi intacta. Pero se sentía feliz cuando muchas personas, incluso de otros
países, se acercaban por su casa de Fuentes de Ropel para visitarle y contemplarla.
Apenas realizó exposiciones y siempre no lejos de su entorno: En algunos Colegios e Institutos, en pequeños pueblos de León, como Toreno, Valdefuentes del Páramo, Villamañán y Valderas y de la provincia de Zamora, como Valdescorriel, Villafáfi la, Castrogonzalo, y Fuentes de Ropel, en donde residía. También en la Caja de Ahorros de Zamora y en el Ayuntamiento de Parla (Madrid).
La exposición se completa con la edición, por parte del CEB “Ledo del Pozo”, de este libro-catálogo, en el que se añaden algunas piezas más de su abundante obra, tanto de esculturas como de relieves, pinturas, bocetos y dibujos, para dejar constancia de ella y de su buen hacer artístico.
Al mismo tiempo que se da a conocer su obra, queremos rendir un homenaje, aunque sea a título póstumo, a una persona de esta comarca, artista, si queremos popular por el lugar en que vivió y desarrolló su actividad, pero de altos vuelos, que nos deja ver su verdadera creatividad, tal vez desconocida por muchos, debido a circunstancias ajenas a él mismo.
Este Centro de Estudios cumple así con una de sus tareas, la de promover, difundir y valorar el patrimonio y el arte local, del que es un valioso exponente Julio Vecino.
Nuestro agradecimiento a su hija Angelines, que nos ha dado todas las facilidades para poder realizar la Exposición, así como para la publicación del libro. Y por supuesto también a Caja España y al Ayuntamiento de Benavente, colaboradores habituales en todas las actividades culturales que organiza este Centro de Estudios.
Emiliano Pérez Mencía
CEB “Ledo del Pozo”